Los hermanos viperinos,
de lengua afilada y saliva cortante,
disfrutan rezumando malos augurios al grueso de la población.
Lo amargo del discurso aderezan
con mayúsculas faltas de culpa y veracidad,
abarcando toda la gama de injurias y desprecios saldados a su disposición.
Los hermanos viperinos,
de falta de aprecio y simulada potestad,
nunca sacian su voracidad.
Ni su condena.
1 comentario:
ortega y gaset
este, asi de simple le parece cobrecojedor
por la ternura q transmite
ssupernatural
super inhumano
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